Hoy, 27 de octubre, nos vestimos de naranja por el Día Nacional de Concienciación sobre el TDAH, una de las comorbilidades que pueden afectar a las personas con síndrome de Dravet. El objetivo del día de hoy es reducir el estigma del TDAH y favorecer su reconocimiento y detección precoz.
El TDAH, o trastorno de déficit de atención e hiperactividad, es un trastorno del neurodesarrollo que inhibe la capacidad de regular la actividad (hiperactividad), pensamientos y comportamiento (impulsividad) y atención. Se han clasificado tres subtipos: combinado, inatento e hiperactivo-impulsivo.
Aunque el TDAH es la causa más importante de fracaso escolar junto con la dislexia, todavía existen varios mitos asociados a esta enfermedad. Hoy queremos desmitificar cuatro de los más importantes:
Mito 1: El TDAH es culpa de los padres. El TDAH tiene origen neurológico y las zonas más afectadas son la corteza prefrontal, los ganglios basales, la corteza parietal y el cíngulo anterior, dando lugar a un comportamiento que no pueden controlar. Además, tiene una heredabilidad media del 75%, y aunque los factores ambientales influyen, este trastorno no es provocado por cómo se ha criado el/la niño/a o la educación que le han dado los padres.
Mito 2: El TDAH viene del poco aguante de los padres de hoy. A largo plazo, si no se tratan los síntomas de esta enfermedad, disminuirá considerablemente el rendimiento escolar del paciente, pudiendo fracasar académicamente, afectando también al desarrollo social y emocional. Además, son frecuentes los síntomas depresivos e incluso la depresión, otro trastorno con base biológica, por lo que los padres del paciente seguramente tengan más aguante que muchos otros.
Mito 3: El TDAH sólo existe en la infancia. El TDAH afecta tanto a niños como a adultos. Aunque algunos síntomas pueden disminuir o disimularse con la edad, como mover el pie o dar pequeños golpes provocados por la hiperactividad, otros se mantienen. La inatención e impulsividad pueden persistir hasta la adultez, convirtiéndose en un problema crónico.
Mito 4: Solo los niños varones padecen TDAH. Aunque los varones son más propensos a sufrir esta enfermedad, también puede encontrarse en niñas, existiendo diferencias entre ambos. En el sexo masculino predomina la hiperactividad mientras que en el femenino es la falta de atención el síntoma más frecuente.
Existen más mitos sobre el TDAH que debemos frenar entre todos. Concienciemos sobre la importancia de esta enfermedad.